Columna de Opinión: Los desafíos de la conservación en Patagonia, reflexiones a partir de la COP-15 de Biodiversidad

El pasado 8 de diciembre tuve la oportunidad de participar como expositora en un panel llamado «Conservación desde la base hacia arriba y la protección de ríos icónicos en la Patagonia chilena», junto con Andrés Diez de la ONG Puelo Patagonia y Alejandro Avello, alcalde de la Municipalidad de Futaleufú. Fuimos invitados por la ONG PEW Charitable Trusts, para participar en la COP-15 de Biodiversidad, desarrollada en la ciudad de Montreal, Canadá, dando a conocer diferentes miradas en torno a un tema común que es la conservación y el rol en en torno a ella juegan las comunidades locales.

El panel se enmarcaba en un evento global que tenía como objetivo la discusión, conversación y generación de acuerdos entre los países del mundo para ver cómo se logra llegar al objetivo de 30 x 30 que el 30% de la tierra y el mar se encuentren protegidos al 2030. Un porcentaje aún pequeño pero fundamental considerando la actual crisis de pérdida de biodiversidad y cambio climático a nivel mundial. En este contexto la discusión abordaba múltiples aristas de las cuales, pudimos conocer y profundizar en la Meta Nº3 de Aichi para la diversidad biológica, que considera la relevancia de las áreas protegidas y su administración efectiva, proponiendo entre otros elementos, un enfoque basado en el respeto a los derechos humanos, la equidad en la toma de decisiones sobre el territorio y el reconocimiento de las comunidades locales en los procesos de conservación de la biodiversidad.

Como Estrategia de Comunidades Portal de la Patagonia chilena, nos hemos planteado un trabajo basado en diferentes ejes que apuntan a diversos ámbitos que conversan con la conservación. Decisiones políticas, económicas, administrativas son clave para determinar el futuro de las áreas protegidas, como también el conocimiento e investigación, la educación y el respeto por lo local van a dar soporte a una mirada de largo plazo y la creación de una relación virtuosa entre áreas protegidas y comunidades portal. Así, en el pabellón de «Naturaleza Positiva» dimos a conocer el trabajo realizado hasta la fecha en las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes, dónde se están desarrollando planes de acción comunales en conjunto con siete municipios pilotos que buscan mejorar la gestión y la vinculación de las comunidades locales con sus áreas protegidas.

Hablar de comunidades locales y territorio es hacer referencia a diferentes identidades; historias comunes y lejanas; miradas que se encuentran y desencuentran, en este caso frente al tema de las áreas protegidas. Y por lo mismo, el gran desafío y el trabajo proyectado en el tiempo apunta a la articulación de diferentes actores en torno a la conservación. Organizaciones locales, escuelas, universidades, centros de investigación, municipios, servicios públicos y gobiernos regionales deben conversar y sobre todo decidir en conjunto cómo damos el siguiente paso para fortalecer nuestras áreas protegidas en la Patagonia.

Eventos como la COP-15 de Biodiversidad, nos entregan una mirada global sobre temas que ya estamos trabajando a nivel territorial, a nivel local, pero que debemos fortalecer para que nuestra Patagonia sea un territorio de conservación con sentido social. Dónde nuestros procesos de desarrollo local se enfoquen en trabajar con nuevas y antiguas generaciones, desde la identidad y la cultura, promoviendo una protección efectiva de nuestra naturaleza y la biodiversidad que ella alberga.